ESPERANDO A GODOT
Llegó hasta el escenario de La Cava para dar paso al segundo fin de semana del Festival de Teatro de Olite la compañía Pentación Espectáculos, que en años anteriores nos regalaron piezas tan interesantes como César & Cleopatra o Julio César. Para esta ocasión dejaban atrás montajes de carácter más histórico con la intención de adentrar al espectador en una época mucho más contemporánea. La intención era recuperar a dos personajes ya clásicos a pesar de haber sido representados por primera vez hace apenas setenta años: Vladimir y Estragón, o lo que es lo mismo, Didi y Gogó, ese par de amigos que, junto a un árbol que no crece y despojado de hojas, ven pasar el tiempo en la famosa obra de Samuel Beckett Esperando a Godot.
La trama gira en torno a ambos protagonistas, que se encuentran en esta ocasión al borde de las vías de tren, unas que atraviesan el escenario en su longitud y otra que gira y se alza, hasta disiparse, para encontrarse con un árbol agónico que que apenas arroja una sombra que de cobijo frente al calor del día. Didi y Gogo son dos curiosos, que parecen haber salido de una de esas películas de principios del siglo XX, carentes de color y sonido, en la que los personajes buscaban captar la espectación del público a través de la gestualidad extrema y las miradas expresivas para pasar de lo cómico a lo trágico, de la risa a la lástima. Allí, con apariencia desaliñada y vistiendo ropa cansada de vivir, conversan de todo y de sí mismos, se gastan bromas, se enfadan, hacen las paces, dormitan... y todo ello mientras esperan la llegada de Godot, un personaje al que nunca veremos.
Y es que esta historia nos habla de la condición humana, de cómo la esperanza (en este caso fundamentada en el objetivo común de esperar al Señor Godot) hace que esta simpar pareja permanezca al pie del cañón a pesar de su abandonada situación y de que, en ocasiones, el no suceder nada, el no ocurrir algo trascendental les suponga tal abandono interior que incluso se planteen en varias ocasiones colgarse del árbol. Todos los días son el mismo día y todas las noches, la misma noche. Es un bucle sin salida, de locos, que apenas se ve alterado por la llegada de una pareja, Lucky y su amo Pozzo, servil hasta la náusea el uno, déspota y cruel el otro. Con ellos, advertimos cómo ven la situación de explotación Didi y Gogo, y cómo puede haber gente en peor condición que uno mismo. Es por ello que, a pesar de todo, y cuando las cosas pintan mal y el ánimo decae, la llegada de un emisario del señor Godot advirtiendo de su llegada "hoy no, pero seguramente sí mañana", les devuelve la fe en la espera, las ganas de continuar y, de algún modo, de seguir creyendo que merece la pena despertarse un día más.
El trabajo actoral es inconmensurable, es sencillamente una maravilla tener la oportunidad de encontrarse con unos actores tan capaces. Todos ellos, desde Pepe Villuela a Alberto Jiménez, de Fernando Albizu a Juan Díaz, incluso Jesús Lavi con su pequeño papel de emisario del señor Godot, realizan un despliegue que dejó tan buen sabor de boca que los espectadores, al final, les ovacionaron con deleite, muchos de ellos en pie. Les dotan de humanidad, los muestran grotescos, desastrosos, ingenuos, atormentados, locos, desatados... En este sentido, se palpa el esfuerzo de Antonio Simón por coordinarlos a todos y exprimir sus cualidades al dirigirlos, consiguiendo un conjunto atractivo desde la propia condición compleja del argumento sin que el espectador pierda interés.
Al final del montaje, el público se marchó como los personajes, continuando con sus vidas, con la sensación de que no han visto nada, y a la vez lo han visto todo... Esa es la magia de esta pieza, de este Esperando a Godot tan fascinante y tan bien llevado, y quizá por eso nunca esté de más ir a verla. Este es un magnífico ejemplo de por qué hay que seguir acudiendo al Teatro.
REPARTO
Pepe Viyuela, Alberto Jiménez, Juan Díaz, Fernando Albizu y Jesús Lavi
EQUIPO ARTÍSTICO
Dirección: Antonio Simón
Diseño de escenografía: Paco Azorín
Diseño e iluminación: Pedro Yagüe / Vestuario: Ana Llena
Espacio Sonoro: Lucas Ariel Vallejos
Ayudante de dirección: Gerard Iravedra
Productor: Jesús Cimarro
Esperando a Godot es una producción de Pentación Espectáculos
Más información: https://pentacion.com
No he visto ni leído la obra, pero sin duda me has creado la necedidad de hacerlo.
ResponderEliminar¡Enhorabuena por la estupenda reseña!
Muchas gracias Undine por tus palabras, cuando algo te apasiona luego lo describes de otra manera jeje
EliminarUn besito
Hola!
ResponderEliminarCreo que está obra me gustaría pero el mérito es de tu reseña, si la veo en cartelera igual paso de largo. Es una alegría que hayan vuelto el teatro y el cine aunque sean con nuevas condiciones.
Besos!
A mí también me hubiese pasado lo mismo. A bote pronto no hubiese sido una obra que me hubiese llamado demasiado la atención puesto que me atraen otro tipo de propuestas. Sin embargo, y aquí está la magia del teatro, creo que siempre siempre, hay que ir sin prejuicios y asistir a todo lo que puedas, ya que lo que quizá en un primer momento te deja indiferente sobre el papel, luego te enamora jeje
EliminarBesoooooo
Leí la obra hace muchísimo años y me lo pasé en grande. Ésta la vería sí o sí, ojalá tenga oportunidad
ResponderEliminarBesos
Ojalá tengas suerte y gire cerca de tí, los actores están impresionantes y el montaje en su conjunto es realmente destacable.
EliminarBesos veraniegos
La he visto en varias versiones pero siempre desde el propio escenario, es la pega o lo bueno de llevar casi 30 años trabajando en teatro. Esta versión aún no la he visto. Besos
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