Pamela
La Pelipequirroja.
Con Pamela o la virtud recompensada, de Samuel Richardson, llego a la premisa "Clásico en el que el personaje principal sea una mujer" del Reto "Todos los Clásicos grandes y pequeños 2020" de nuestras adoradas Inquilinas de Netherfield. No sabéis las ganas que tenía de leer este libro, tantos años en mente, tanto tiempo diciendo: De este año no pasa. Y nunca llegaba el momento ¿La razón? en esta ocasión no fue tanto la falta de tiempo y los compromisos adquiridos, como la falta de una edición en condiciones en castellano...y sigue sin haberla; Cátedra es hoy por hoy la única que nos ofrece la novela en nuestro idioma, y no me veo capacitada de leerla en inglés, eso si lograse pasar del título...vaya. Desde aquí, Miss Hurst y una servidora, alzamos la voz y algún que otro mail a ciertas editoriales, solicitando una edición digna de nuestra icónica Pamela ¿Os imagináis una edición en Dépoca, Impedimenta...? y eso si, con una buena traducción, por favor.
Una novela epistolar publicada en 1740; su autor, Samuel Richardson, no hubiera podido imaginar que su obra sería un auténtico boom en su época, poniendo de moda el género epistolar, el cual había caído en desuso y había sido denostado desde tiempo atrás. Richardson no solo pone de moda el género epistolar, también un tipo de sombrero femenino que desde ese momento es conocido como "Pamela" por ser el que habitualmente luce la protagonista; además, la novela ha sido considerada durante dos siglos, como la primera novela sobre acoso sexual de la historia, y escrita por un hombre. Aquí tengo algo que decir al respecto, pero no debemos olvidar el contexto histórico y social en el que fue escrita y sobre todo, la situación que vivimos actualmente y como los lamentables sucesos que por desgracia vivimos día a día, nos harán ver esta clásica y fabulosa obra con otros ojos. Os lo pido por favor, se que no será fácil, pero intentemos leerla con ojos de los siglos anteriores al actual para entender su importancia en la literatura y la sociedad durante tanto tiempo.
Una novela epistolar publicada en 1740; su autor, Samuel Richardson, no hubiera podido imaginar que su obra sería un auténtico boom en su época, poniendo de moda el género epistolar, el cual había caído en desuso y había sido denostado desde tiempo atrás. Richardson no solo pone de moda el género epistolar, también un tipo de sombrero femenino que desde ese momento es conocido como "Pamela" por ser el que habitualmente luce la protagonista; además, la novela ha sido considerada durante dos siglos, como la primera novela sobre acoso sexual de la historia, y escrita por un hombre. Aquí tengo algo que decir al respecto, pero no debemos olvidar el contexto histórico y social en el que fue escrita y sobre todo, la situación que vivimos actualmente y como los lamentables sucesos que por desgracia vivimos día a día, nos harán ver esta clásica y fabulosa obra con otros ojos. Os lo pido por favor, se que no será fácil, pero intentemos leerla con ojos de los siglos anteriores al actual para entender su importancia en la literatura y la sociedad durante tanto tiempo.
La novela consta de dos partes. En la primera, Richardson, a través de las cartas de Pamela, pretende crear un manual para jovencitas virtuosas, o como serlo, sin más pretensión, como un libro de autoayuda actual, solo que en lugar de hacerlo a través de frases de empoderamiento, positivas o autoconvincentes, él lo hace de la manera más efectiva: predicando con el ejemplo. El de Pamela, por supuesto. Como era normal también en la época, la obra no se queda en lecturas a solas en casa o lecturas conjuntas entre damas de la sociedad; la historia llega a la calle, a las tertulias y hasta a la prensa, haciendo de Pamela, una incitadora en lugar de una víctima. La tachan de oportunista, de usar malas artes y hasta de provocar abiertamente al pobre e indefenso Señor B. Y no, esto no es parte de la novela, por desgracia es real, lo fue, de tal manera que el autor se vio obligado a ir puliendo los "defectos" de la protagonista reedición a reedición para no echarse encima a la sociedad en general y a la prensa en particular. Por ello, en la segunda parte, Richardson, trata de "enmendar" la actuación del acosador protagonista dando un giro a la historia.
Vamos por partes.
Pamela Andrews es una joven de origen humilde que sirve de doncella en la mansión de una rica y noble dama, al fallecer esta, la joven queda a merced del crápula y ladino hijo de la fallecida, Mr B., pues el servicio doméstico pasa, como si de objetos se tratasen, de padres a hijos, de fallecidos a herederos; Pamela nos cuenta de primera mano, lo que sucede dentro y fuera de la casa desde que la Señora falleció, personaje a personaje, los conocemos a través de su mirada, su experiencia o su impresión, y hay que decir, que todos ellos muestran una actitud muy cuestionable, y es que poderoso caballero es don dinero, el que lo posee se cree dueño y señor de lo que le rodea, y el que lo anhela lo venera como si de un Dios se tratase.
Epístola a epístola la protagonista nos cuenta los apuros que pasa cuando Mr B. pone los ojos en ella y para su desgracia, las manos; lo que comienza siendo incómodo o de mal gusto, se comienza a tornar peligroso, incluso humillante y vejatorio para la joven Pamela, a la cual le cuesta cada vez más, salir ilesa de los ataques del Señor de la casa, pasando miedo y temiendo cada vez más por su virtud. El comportamiento del protagonista, totalmente aceptado y normalizado en la época, es además aplaudido e incluso incitado por el círculo más cercano ¿Qué una criada no accede gustosa y agradecida ante el gesto de su señor? ¿Qué más quiere una pobre doncella que su señor le muestre esa deferencia? Y es que Pamela no lo tiene nada fácil, su voluntad y su negación no flaquean nunca, la Fe que posee la ayuda a enfrentarse a su señor y a ejercer una férrea oposición a sus impúdicas intenciones.
Hasta que Mr B. le propone matrimonio.
Como os he comentado antes, Samuel Richardson, se vio en la tesitura de dar un giro a su obra para evitar ser criticado duramente por la prensa, y la única forma de que su Pamela no fuera vilipendiada e insultada en los tabloides, y su virtud se viera al fin recompensada (que tomen nota las jovencitas) Mr. B. prendado por esa virtud, decide poner fin a sus deshonestas intenciones y hacerla su esposa. Sé lo que estáis pensando, pero es necesario que lo miremos con ojos de siglos pasados.
En la segunda parte, veremos como Pamela se convierte en una buena y amante esposa, señora de su casa, y la perfecta dama en sociedad, cosa que irá sucediendo poco a poco, una recién llegada con sus orígenes y sobre todo, de la manera que "logró" pasar de doncella a Señora, no es del agrado de muchos; pero la virtud, ha sido recompensada ¿O no?
Queridísima Yolanda, cómo adoro estas novelas. Leí pamela hace algunos años tras mucho tiempo buscándola. Evidentemente, mi edición es la de Cátedra. Es cierto que lo que acontece en la historia visto desde hoy día es tremendo, pero no deja de ser una realidad que sucedía en aquellos tiempos (derecho de pernada y demás).
ResponderEliminarA mí se me hizo un poco repetitiva en algunos momentos, quizá le sobran algunas páginas, no obstante, es de las lecturas que más orgullosa me siento de haber hecho. Es más, a ver si Ático de libros traduce Clarissa, como habían anunciado hace algunos años.
Por si no lo sabes, desde Italia nos trajeron una serie basada en Pamela. Se titulaba elisa de Rivombrosa. Es un poco culebrón, pero con clase. A mí me encantó.
Un abrazo, y feliz comienzo de semana!!
Estoy de acuerdo en lo de repetitiva en ocasiones, pero quise verlo como el resultado de esa obsesión de B hacia Pamela, marcándola tanto que ella no podía pensar en otra cosa. Pero cien páginas menos no hubiera estado mal.
EliminarNo sabía lo de la serie, imperdonable 🤫
Besitos 💋💋💋
Pues creo que me apunto esta novela (o las dos XD), pero para más adelante ;-)
ResponderEliminarBesos.
Si yo me he pasado décadas esperando leerla, seguro que algún día la leerás 😂😂😂
EliminarBesos 💋💋💋
Vaya, Yolanda: un gratísimo descubrimiento. Desconocía por completo a Richardson. Y se agradece que recalques el que hay que leerla desde la perspectiva de la época en que se escribió. Debió de calar mucho esta obra en su momento, cuando el autor tuvo que reeditarla en varias ocasiones, porque escandalizaría a la sociedad, como aclaras en tu reseña. Y, pese a ese cuidado del autor, seguro que le llamaron de todo. Como para no tener en cuenta esta obra, aunque si solo hay la versión de Cátedra, pues esperaré a ver si alguna otra editorial tiene a bien traducir una joya como esta. Y hago este comentario, porque el precio que tiene Cátedra en digital lo encuentro totalmente abusivo. Besotes.
ResponderEliminarLo que no entiendo es cómo joyas de la literatura no son publicadas en varios idiomas y en varias ediciones, y luego ves Best sellers mediocres en ediciones varias...en fin.
EliminarBesitos 💋💋💋
Creo que necesito ese manual para jovencitas virtuosas ;) Fuera bromas, me tientas mucho.
ResponderEliminarBesos
Somos tan virtuosas que no hay manual que nos iguale 👯
EliminarEs una gran obra, magnífica.
Besitos 💋💋💋
Hola Pelirroja lectora.
ResponderEliminarTuve una época en la que me gustaba mucho la literatura clásica que estaba plagada de tejemanejes. Pero ahora me cuesta ponerme porque no me identifico igual que con las modernas y me falta eso. Lo de las lecturas epistolares nunca me llamó. Y mira que me gustan las cartas.
Besitos, guapi.
Pues yo ya hacía tiempo que no me identificaba con las últimas lecturas, pero no de ahora, sino desde hace meses 😖 al leer y releer estás novelas me he vuelto a sentir ilusionada por leer 😉🥰
EliminarBesitos 💋💋💋
Me gustan los clásicos, pero esta Pamela no me atrae nada de nada :/
ResponderEliminar¡Muchos besos, preciosa!
Mil besos gordi!! 💋💋💋
EliminarPues no conocía al autor ni la obra, y por lo que cuentas creo que me gustaría, aunque el tamaño me echa un poco para atrás. Coincido contigo en que debemos leer las obras escritas en su contexto, no con nuestros ojos de ahora. No es posible, sencillamente.
ResponderEliminarBesos
Yo también pensé que me costaría más leerla, y excepto algunas cartas algo más aburridas, el resto se leé muy bien 😊 la curiosidad me puede.
EliminarBesukis 💋💋💋
Lo apunto para leerlo más adelante, que me has dejado con ganas y curiosidad.
ResponderEliminarBesos
Engancha, hay que tener un poco de paciencia en varios momentos pero es muy adictiva, el tira y afloja entre B y Pamela atrae mucho 😁🥰💋
EliminarQué maravillosas obras se han creado sobre la base epistolar. Ésta en concreto aún no la he leído, pero tu comentario me hace apuntarla sin vacilaciones.
ResponderEliminarAntes leía mucho el género epistolar, es ideal para cotillas como yo, es como espiar al vecino 😁
EliminarLa he disfrutado mucho.
Besos 💋💋💋
Me encanta el género epistolar y hace mucho que no me animo con él así que tomo buena nota.
ResponderEliminarBesos
Combina la epístola con el diario, y me sorprendió muchísimo lo fluida que era la lectura dado el género 🥰💋
EliminarQuiero incluir entre mis lecturas los clásicos. Tomo nota.
ResponderEliminar¡Besos!
Sino estás acostumbrada a los Clásicos tal vez esta te resulte algo pesada, para comenzar, Wilde o Gaskell son más amenos.
EliminarPues no lo conocía... me lo apunto, creo que me gustará =)
ResponderEliminarBesotes
Es ideal para los que tenemos alma de portera, ¡La de chismes que salen en la novela!😂🥰💋
Eliminar¡Hola!
ResponderEliminarNo lo conocía, pero no creo que sea un libro que disfrute. Voy a dejarlo pasar que tengo mucho pendiente.
Gracias por la reseña.
Besitos :)
Dichosos pendientes, tendrían que desaparecer por combustión espontánea pasado un tiempo sin haberlos leído 😂😂😂
EliminarBesukis 💋💋💋
Tomo buena nota de tu nueva recomendación que creo que me gustaría mucho.
ResponderEliminarGracias!!!!
Besitos
Es muy entretenida, no puedes evitar saber que va a ocurrir a continuación 😅🥰💋
Eliminarhola,
ResponderEliminara mi no me llama demasiado la atención, soy poco de clásicos. Me alegro que lo hayas disfrutado, yo lo dejo pasar
Gracias por la reseña
Besotessssssssssss
Gracias a ti cielo! 🥰💋
EliminarEstas Netherfield han causado un auténtico revuelo con su reto de los clásicos. Este ni lo conocía y me gusta lo que cuentas. Me lo llevo anotado.
ResponderEliminarBesos
Si, son dos anarquistas literarias, yo ya solo pienso en leer clásicos, ni cocino, ni limpio, ni voy a comprar, estoy pensando en dejar el trabajo...😂😂😂😂😂
EliminarBesitos 💋💋💋
Inglaterra es la cuna de la novela moderna y Samuel Richardson quien abrió la puerta a la misma junto con otros autores (Fielding, Defoe, Sterne…) que bebieron -¡y con gran provecho por su parte!- en Cervantes. Las novelas y autor@s del XIX elevaron ya el género a categoría como es sabido.
ResponderEliminarEl asunto que se dirime en "Pamela" es conocido y verdaderamente es un auténtico 'topos' (lugar común) en la literatura: la mujer de orígenes humildes que se eleva a la clase alta merced a su matrimonio con un hombre de la misma. Este asunto del decoro socio-económico (los ricos con los ricos, los pobres con los pobres) sigue dando juego incluso en nuestros días y viene de la noche de los tiempos. Lo interesante de esta y otras novelas del estilo es si están bien o mal escritas. Y ésta lo está, aunque estoy contigo en la necesidad de buenas traducciones y ediciones porque las baratas o regaladas que circulan por ahí muchas veces hacen flaco favor a estos autores clásicos.
No sabía que la denominación de la pamela provenía precisamente de esta novela, "Pamela". Es semejante al nombre de la chaqueta de lana femenina llamada rebeca que toma su nombre de la prenda que porta Jane Fontaine en la peli de Hitchkov, "Rebeca".
Un gusto leer tus reseña, Yolanda.
Besazo!!
Ni Richardson ni Hichtcock hubieran imaginado que acabarían marcando tendencia en moda 😂
EliminarEs muy difícil mirar con ojos actuales estas novelas sin cabrearse, pero hay que hacer el esfuerzo porque sino no podríamos leer clásicos sin ofendernos 🙄
Besitos 💋💋💋
Vaya, pues qué completito poniendo de moda tantos conceptos en una misma obra: lo epistolar, la pamela, el acoso sexual... Algunos clásicos apabullan un poco por lo densos que son, pero veo que este a pesar del buen nº de páginas se lee bien. Yo, que también me apunté al reto de las Inquilinas, a ver qué clásicos elijo.
ResponderEliminarUn beso ;)
Ains, Yolanda, estaba sufriendo por no haber podido pasarme todavía a leer la reseña, de verdad que el trabajo me come, no doy para más...
ResponderEliminarSabes que estoy en las mismas que tú, no me gustan las edicicones de Cátedra, ergo sigo sin haberle hincado el diente a Pamela. ¡Alzaremos nuestras voces hasta que alguien nos haga caso! (o llueva chocolate, que seguramente ocurrirá antes... jajaja). Pues me ha gustado mucho lo que has contado, ya no solo sobre la novela como sobre el contexto que rodeó a la novela y los "ajustes" que tuvo que ir haciendo el autor. Yo soy muy pesada con lo que tú recalcas varias veces en la reseña, los clásicos hay que leerlos pensando en cuando fueron escritos y en la sociedad y la época que representan.
Neni, me ha encantado la reseña y me he quedado con muchas ganas de echarle también el ojo a la Shamela de Fielding... jajaja.
¡Besote!
Me has dejado con la boca abierta con el último párrafo. Qué mala es la envidia de verdad
ResponderEliminarNO había oído hablar de esta Pamela (sí, me muero de la vergúenza) pero me gusta mucho todo lo que has contado y el hecho de que sea epistolar es un plus, hace tiempo que no leo una novela epistolar y me suele gustar el género
Besos
¡Holaaa! No conocía ni la novela ni el autor (shame on me!) pero es interesante eso que comentas de leer las novelas con los ojos de la época, a veces las críticas pecan de no entender el contexto en el que se escriben las novelas, como ocurre por ejemplo con Mujercitas, y criticamos aspectos que en aquella época eran lo que eran. No soy fan de las novelas epistolares, he leído muy, muy pocas, pero voy a tomar nota de esta novela porque lo que cuentas me gusta muy, muy, mucho. Un saludo!
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