RELATOS DE UNA INFANCIA de Eva López López

Esta es la historia del Gato Garrapato

 y la Gata Pulgosilla,

vivía él en un zapato

 y ella en el dobladillo de una cortinilla,

si el pera pequeño, era ella pequeñilla

¡Vaya pareja hacían!

Maullaba Garrapato y marramiau hacía Pulgosilla,

y entre los dos componían sinfonías

una para bailar el lago de los patos 

y otra para cantar la canción de Campanilla

¡Cómo se divertían Garrapato y Pulgosilla!..

(El Gato Garrapato, fragmento, cuento de Yolanda T. Villar)

En mi casa todo el mundo contaba cuentos. Cuentos para dormir, para levantarse, para comer, para bañarse, para dejar de pelear, para no llorar, para no estar triste...cualquier motivo era bueno para contar un cuento; los contaba mi abuelo, mi madre, mi padre, mis tías, mis tíos, Concorde -la vecina que nos cuidaba a veces- toooodo el mundo tenía siempre un cuento listo para cualquier momento ¡Vaya familia de cuentistas que hemos sido siempre! además nuestros cuentos eran mágicos pues aunque siempre empezaban igual nunca se sabía como sería el final, todo dependía de como se encontrase el "cuentista" o el "oyedor de cuentos" de como fuera el día o de que mensaje habría que transmitir, los cuentos se adaptaban al momento y la situación; pronto aprendí a manejar los cuentos para mi propio beneficio, si necesitaba un final feliz, pues lo inventaba, si necesitaba un final educativo, pues me lo sacaba de la manga (que se lo digan a mi hermana que con mis finales alternativos conseguimos que durmiera con la luz apagada, que comiera plátanos o que no rayara las paredes con los rotuladores) dame un mensaje y yo te lo transformo en cuento. Así surgieron mis historias "tuneadas" del Cantar de Mío Cid -que me salvó un examen- La Divina Comedia -que le metió el miedo en el cuerpo a unos cuantos "pecadores" llamados novietes de adolescencia, y un extraño Western que me trajo un primer premio literario ¿Cómo no me van a gustar los cuentos? 

Cuando vi este libro en las novedades de Círculo Rojo supe que era mi libro, una niña en un bosque leyendo un libro y un buho sobre su regazo, el titulo, igual que un anzuelo "Relatos de una infancia"  ya no existía ningún otro que me interesase; la sinopsis no podía ser más corta y explícita: Recopilación de relatos pertenecientes a la infancia de la autora, en los cuales priman lo mágico a la vez que lo fantástico ¿A alguien le suena esto? ¡En efecto! a esta que escribe. 

Y no es ni más ni menos que eso, o mejor dicho, ¡nada más y nada menos! cinco cuentos que forman parte de la memoria de la autora, una joven la cual acaba de dejar la adolescencia atrás ¿No es una suerte? me explico, sus recuerdos de estos cuentos infantiles están todavía frescos, si cierra los ojos todavía puede oírlos, tener la sensación que alguien se sienta en su cama y se los cuenta, oler las páginas al pasarlas, el beso de buenas noches tras cerrar el libro...Eva López López todavía no ha sido adulterada, agitada, removida y golpeada por una vida que si bien es maravillosa también te obliga a "tunear" tus vivencias para no venirte a bajo a las primeras de cambio; ella es fresca, ágil, ligera, natural, sencilla y sin artificios, como sus cuentos los cuales mezclan la realidad con la fantasía de manera tan espontánea como lo es ella misma.

Son cinco cuentos cortos, acompañados de sencillísimas ilustraciones, las que hace una niña a lápiz en su libro de cuentos favorito, relatos breves pero intensos pues los vive en su cabeza de igual manera que en el papel y así nos los transmite. Eso es todo. Todo es. No busquéis más en ellos que lo que os he contado, solo leerlos, dejaros llevar y volver a ser niños de nuevo, solo hacen falta 20 minutos, sería como si alguien os los regalara de repente, sumar veinte minutos a vuestro preciado tiempo ¿No es un gran regalo? 

Relatos de una infancia, de Eva López López, un pequeño regalo que nos alargará la vida  y nos alegrará los días. Sencillo y fácil. 

PUNTUACIÓN:

RELATOS DE UNA INFANCIA

Eva López López

Editorial Círculo Rojo

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