AMANECE EN BELCHITE de Jaime García Simón.

El árbol se levanta sobre la tapia hundida.

El viejo campanario –la paloma que había

huyó bajo la guerra- está desierto:

Todo es la sombra.

 El monte desolado invade el patio,

el pozo seco,

el niño destrozado por la yedra.

Alguien recuerda –Antes estuve aquí,

hoy ya no vuelvo- por los muros de adoba calcinados:

 ¿Quién ha puesto el olivo

enfrente del olivo?

 ¿Quién ha dejado sangre

enfrente de la sangre?

 ¿Quién ha traído muerte

en contra de la muerte?

 ¿Quién, en fin, ha destruido al hombre

contra el hombre?

 Sobre la casa yerta ya nadie se levanta.

(BELCHITE de Labordeta)

Miriam vive en Belchite, un pueblo aragonés de escalofriante pasado. Con 14 años comienzan a sucederle extraños fenómenos que trastocan los pilares de su misma cordura, en mitad de una familia que parece cada vez más fragmentada.
Aterrorizada, trata de buscar explicación a sus problemas en unos viejos diarios de Macarena, su madre, que encuentra en el trastero de casa. Los sorprendentes relatos que narra Macarena en primera persona, muchos años antes, resultan ser muy parecidos a los que ella viene sufriendo, por lo que intuye que pueden tener alguna interconexión, como fnalmente descubre.
La colosal historia que halla en esos escritos y su consecuencia intrínseca, son de tal magnitud, que jamás podría ni tan siquiera haberlo imaginado. Poco a poco, el misterioso puzzle en el que se han convertido sus vidas, parece por fin encajar y comienza a darse cuenta de su situación real.

Desde que era pequeña nos contaban historias de miedo sobre almas en pena que quedaron atrapadas en un viejo pueblo abandonado cerca del mío; las historias de los viejos hablaban de un grupo de pastores y sus familias que desaparecieron de la noche a la mañana dejando el pueblo abandonado y las ovejas en los corrales. La gente de derechas decía que aquellos hombres habían muerto por sus pecados y habían sido consumidos por los fuegos fatuos tras habérselos tragado la tierra. Se decía que habían quemado iglesias durante la guerra, que habían asesinado curas, deshonrado monjas y que guardaban los tesoros que habían robado durante los ataques a casas santas en el fondo de un pozo del que sacaban agua para el ganado. Sin embargo, los del otro bando decían que los habían fusilado sin respetar ni a niños ni a ancianos y tirado sus cuerpos a lo más profundo de ese pozo, para después lodarlo con piedras y zarzas.  En los días de mucho calor o fuertes nevadas se oían sus lamentos por los alrededores y algunos habían asegurado ver  figuras de pastores  sobre la loma en la que se encuentra el pueblo, a día de hoy convertido en finca privada de caza.  Historias, leyendas, cuentos...hasta un día, que tras atropellar a un zorro en la carretera, paramos el coche para ver qué le había pasado al animal, ya caída la tarde, casi de noche, un angustioso día de agosto y al retiraros a la cuneta con el animal mientras esperábamos al Seprona, varias llantos de niños y adultos llegaron hasta la carretera, dejándonos helados y en silencio. 

Nos dijeron los guardias que era el rumor de las aguas subterráneas del pozo que venían desde el pantano, los silbidos de la corriente al juntarse con el aire que entraba por las galerías, parecían llantos o lamentos... Pero cada vez que paso por aquella carretera, miro al pueblo y mantengo la respiración de la inquietud que siento.

Cuando vi este libro, junto lo que ya conocía de Belchite por documentales, libros y por presencia "in situ" sabía que no podría dejarlo pasar, y cuando lo tuve en mis manos suspiré y me fui directa a mi estudio para ponerme con su lectura inmediatamente, el resto del mundo tendría que esperar. Y bien que esperó porque no hice otra cosa durante dos tardes que leer con avidez el libro, y es que no hay nada como empezar sugestionada una lectura para que prestes más atención incluso a cada linea, eran tantas mis ganas de "pasarlo mal" que tuve que respirar hondo para no ver fantasmas donde solo había letras, intensa que ha sido una siempre, ea; pero es que el autor no te lo pone fácil, ya seas devoradora atroz de estas historias como miedosa innata, el pellizco en el estómago no te abandona en toda la narración, saltas del sillón como si tuvieras un resorte en el culo -no me voy  a poner fina a estas alturas, tonterías na más- seguid leyendo y me entenderéis.

Miriam, una adolescente, que si ya esto es complicado, ve como la paz familiar se desmorona con un padre ausente y una madre triste,  y se siente más perdida de lo que una joven de su edad se siente de por si y en un intento de encontrar respuestas o tal vez refugio, encuentra los viejos diarios de su madre, Macarena y se sumerge de lleno en ellos  ¿os imagináis lo que significa para una mente adolescente llena de dudas y temores una lectura intrigante y misteriosa como lo es la que ha caído en sus manos? si a un adulto le cuesta encontrar explicaciones a la incertidumbre y mantenerse frío ante cuestiones que se escapan de su entendimiento ¿qué no harán estos descubrimientos en una adolescente? dejemos a parte si creemos o no en sucesos paranormales, leamos y empaticemos, que os aseguro que es cosa hecha. La joven un buen día queda totalmente aterrada cuando escucha   que al otro lado de la puerta hay alguien que quiere llevársela, no es un mal sueño, no es una sensación, algo que se escapa a su razón intenta apoderarse de ella y consigue que la muchacha quede totalmente azarada ¿qué le está pasando? ¿quién puede ayudarla? ¿la tomarán por loca? su inquietud lejos de desaparecer aumenta con los diarios de su madre, la cual narra el día a día de su matrimonio y los extraños sucesos que comienza a padecer desde que se queda embarazada. Miriam lee absorta los diarios viendo como con cada página, con cada suceso, los hechos se vuelven más inexplicables y más terroríficos; llegados a este punto la tensión psicológica y el pellizco del ombligo me hacen ver que me he levantado del sillón y estoy leyendo de pie, la expectación ante lo que leo es brutal, dejar de leer es imposible, he llegado a ese punto de la narración de no retorno en el que la historia me tiene tan atrapada que ni puedo huir ni ella me soltará. Los que seáis amantes del género thriller o de las películas tipo Insidious, veréis en la novela de Jaime García un historia visual y terrorífica de la vieja escuela, de esas en las que el suspense se siente, se respira, se escucha (solo le falta a la novela una banda sonora) se palpa, un terror psicológico, nada gore porque no lo necesita, que se apodera de tí en cada momento, que te paraliza, te sobrecoge y te ahoga por momentos ¡Cómo me gusta! y como se que a algunos de vosotros les da miedito esto, pues sonrío maliciosamente porque lo he hecho adrede. 

CONCLUSIÓN: Una novela de emociones en las que se conjuga a la perfección la intriga, la incertidumbre y el terror con la esperanza y el amor más grande y sincero; una historia visual al más puro estilo del terror clásico, psicólogico, con un trasfondo histórico y real que añade suspense y veracidad a una historia de por si intensa, plagada de giros y sorpresas, que si bien cuenta con un muy buen final, yo, amante de lo apoteósico (soy valenciana, sin una mascletá final las cosas no son lo mismo) hubiera arriesgado más aún y hubiera hecho un final, si, exacto, de Traca.  Aún así, es una historia brutal de principio a fin. El autor cuenta desde ya con mi admiración, ea. 

PUNTUACIÓN:

AMANECE EN BELCHITE

Jaime García Simón

Editorial Círculo Rojo

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