Verdi, 36 de Rosa García Calleja

Verdi, 36 de Rosa García Calleja

Verdi 36

Marta, una policía novata, se verá inmersa en una investigación de asesinato en la que al parecer uno de sus nuevos vecinos se encuentra implicado. Su inexperiencia no le avisa de que puede ser peligroso y su testarudez le da el empuje suficiente para seguir una investigación que sabe no será fácil. En el transcurso de la misma, las dudas irán recayendo en cada uno de ellos pareciendo, por un motivo u otro, sospechosos potenciales de la muerte. Marta con su empeño y dedicación desgranará poco a poco el misterio y averiguará cuál de ellos es el asesino. En el camino conocerá a personas vitales, que de alguna forma se ayudarán mutuamente a zanjar asuntos familiares pendientes, conseguir un sueño e incluso vencer sus miedos.

No me gusta tener libros esperando meses a ser leídos y reseñados, sobre todo cuando te han sido entregados por los propios autores, como quien te deja a su hijo para que lo cuides y le prestes la máxima atención, sabiendo que te entregan lo más preciado para ellos; no me gusta porque me parece ante todo una falta de respeto ante quien ha tenido el gesto y la generosidad de confiarte tan estimado obsequio.Ya le pedí perdón a la autora por este, ya desmesurado, retraso, pero ya sabéis de mis transitorias -aunque ya duran demasiado-  penurias oculares y lo mucho que me cuesta leer de por si, no hablemos ya de hacerlo en ebook, cuando la pantalla se convierte en tu peor enemigo.Y si no fuera suficiente este pesar por no "cumplir" con los autores, máxime cuando una vez leída este libro me dije ¿Pero cómo no he leído esta novela antes? y es que si la vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida, y si,  de vez en cuando internet y la magia de las RRSS ponen en tu camino a autores y novelas que de otra manera te pasarían desapercibidas, y piensas ¿Puede ser más injusto el mercado literario? o ¿Acaso la culpa es de los lectores que leemos cual rebaño sin salirnos de las lindes? me explico, y voy paso a paso. 
   Tras leer un par de novelas seguidas -muy respaldadas por editorial y mercado- y haberme quedado fría y decepcionada, me pongo por fin con Verdi, 36 de Rosa G. Calleja y me veo sumergida en una historia trepidante, un thriller cargado de acción desde el principio, que te atrapa desde las primeras páginas, así ¡zasca pimba! y ya estás metida de lleno en la trama; para empezar tenemos a una fémina como protagonista, que en mi caso ya cuenta con puntos a favor, porque si, porque me gusta arrimar el ascua a mi sardina. Que esté a favor de protas femeninas no quiere decir que esté en contra de los masculinos, pero a mi me atraen más, me es más fácil empatizar, entender y hasta odiar a las de mi género, y es que lo contrario de amar es odiar, y eso ya de por si implica complicidad y simbiosis de cualidades o defectos, así son las cosas.   Y es que yo soy muy intensa, no creo que a estas alturas se sorprenda nadie con lo que digo, soy intensa y teatrera, como esas viejas glorias de Hollywood que "sobreactuaban" pero que tan bien quedaba en pantalla, para que se notara que cuando disfrutaban lo hacían a lo bestia y cuando sufrían lo hacían hasta la extenuación...pues así soy yo, y lo soy hasta con mis lecturas. Si una protagonista me atrae y la trama me atrapa, es que hasta lo vivo. 
   Marta Palau es una guardia urbana barcelonesa, una mujer resuelta, valiente, segura de sí y de su buen hacer profesional,  pero con una pequeña debilidad: su fortaleza tiene un talón de Aquiles, la fragilidad e inseguridad que te da haber perdido a tu madre de niña, y la culpabilidad que siente por ello. Marta da un paso más allá en su deber profesional cuando decide averiguar qué ha pasado con su vecina Teresa ¿Qué pinta una guardia urbana metida en un asunto tan peliagudo? y no me digáis que no, pero no es muy normal un thriller protagonizado por una guardia municipal, y es que parece que solo una buena novela negra o un buen suspense deben estar encabezados por mujeres y hombres de alto rango policial y pertenecientes a grupos especiales ¡Pues toma del frasco Carrasco!...no puedo evitarlo, cada vez me gusta más esta muchacha y esta historia, aunque temo que se quién es el culpable antes de llegar a la mitad ¡Y es que soy tan lista y experta en este tipo de novelas, que dármela a mí es díficil! ¡Meeec! ya me he pasado de listilla, porque para bien de la historia la autora juega al despiste con nosotros y nos da en todos los morros con un final que sorprende sí o sí ¡Toma pastillas de goma, sabelotodo! y lo digo por mí.    Nada me gusta más en una novela en general y un thriller en particular que me sorprendan y me hagan caer del burro por espabilada y marisabidilla, porque si no me sorprenden a estas alturas, la novela no vale un pimiento, da igual que los personajes sean perfectos, la trama adictiva, que como no me impresiones y me dejes pasmada al final, me has perdido para siempre jamás.    Junto a Marta encontramos a unos personajes de reparto -que si, que soy teatrera y peliculera y ya me veo reseñando en Fotogramas- que tiene su peso y volumen en la historia, es más, sin ellos jugando al despiste -algunos más que otros- la intriga no sería lo que es; tenemos al compañero de trabajo y al de piso, uy uy uy, Daniel y Hugo, que un buen partener es fundamental para dar juego y consistencia a una buena historia, aunque no necesario 😈 y a otras dos compis, Carla y Lina,una que nos caerá bien y la otra, pues como que no, y aunque no os voy a decir quién es quién, para no desvelar nada, deciros que esto tiene su intríngulis pues nos mantendrá sospechando como si no hubiera mañana, cosa que viene de fábula a personajes, historia y a la propia autora que antes de que acabe la novela debe haber disfrutado de lo lindo jugando con nosotros, más si cabe si eres listilla o listillo, y poniendo el punto final a la novela pensando: ¡Tomad, pardillos, que os creéis que lo sabéis todo! vamos, yo es que la veo hasta frotándose las manos como el señor Burns 😊
   No puedo contaros mucho más porque la novela no es muy larga, poco más de 200 páginas, ya veis que lo bueno si breve...y esto hace que todo pase muy pronto y cada paso de los protagonistas es clave en la historia, así que como suelo pecar de verborrea mejor lo dejo aquí que para atraeros a la lectura de Verdi, 36, ya está la propia novela. 

CONCLUSIÓN: Verdi, 36 es un thriller apasionante, trepidante y con un final sorprendente y redondo que sirve de guinda a un sabroso pastel a camino entre el suspense nórdico y la intriga elegante de la novela negra clásica. La autora me ha sorprendido gratamente y me ha permitido confirmar eso de que lo bueno se hace esperar;  una lectura amena, arrolladora, adictiva e imprevista que se lee rápidamente y te deja muy buen sabor de boca.Como os dije al principio, no entiendo como hay autores que nos son conocidos y valorados como se merecen. Bravo Rosa.  

   VERDI, 36

Rosa García Calleja

Editorial Stonberg

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