Mi pecho es una cajita
que guarda mi corazón,
con el que siento alegría,
paz, felicidad, amor.
Si acerco mi mano a él
le escucho hacer tic-tac
está bombeando la sangre
que por todo mi cuerpo correrá.
¡Qué órgano tan importante
que bonita es su función,
pues no solo me da la vida,
me hace sentir amor.
(Mi corazón de Tiza)
Lo supimos desde casi el primer momento. Fue algo tan evidente que no cabía posibilidad de error.
Yo me lo tomé bien, vamos, que siempre he sabido lo que me pasaba, para mi era algo normal; mis padres y mis abuelos lo llevaron peor, solo al principio, luego todos nos acostumbramos a vivir con ello aunque los primeros años fueron difíciles. Nací con un severo problema de corazón y con solo tres años ya nos dijeron que tarde o temprano, más bien temprano, tendría que someterme a una operación a corazón abierto: podría ser una válvula en el mejor de los casos, siempre y cuando la aorta no siguiera dilatándose, o ambas válvulas, o en el peor de los casos un trasplante. Esto dicho a bocajarro y a principios de los años setenta, cuando los primeros intentos de trasplantes de corazón habían salido mal, pues asusta, para qué engañarnos. Pero contra todo pronóstico, los años pasaron y yo llevaba una vida normal, revisiones, medicación, cuidado con los esfuerzos y poco más, nada hacía pensar que yo era diferente al resto de las chicas de mi edad; y con el paso de los años llegué a pensar que se habían equivocado, que aquel día tan temido durante los primeros años de mi vida, no llegaría nunca, visita tras visita siempre oía las mismas palabras: todo está como siempre, no ha habido cambios, sigue así y nos vemos el año que viene.
Yo me lo tomé bien, vamos, que siempre he sabido lo que me pasaba, para mi era algo normal; mis padres y mis abuelos lo llevaron peor, solo al principio, luego todos nos acostumbramos a vivir con ello aunque los primeros años fueron difíciles. Nací con un severo problema de corazón y con solo tres años ya nos dijeron que tarde o temprano, más bien temprano, tendría que someterme a una operación a corazón abierto: podría ser una válvula en el mejor de los casos, siempre y cuando la aorta no siguiera dilatándose, o ambas válvulas, o en el peor de los casos un trasplante. Esto dicho a bocajarro y a principios de los años setenta, cuando los primeros intentos de trasplantes de corazón habían salido mal, pues asusta, para qué engañarnos. Pero contra todo pronóstico, los años pasaron y yo llevaba una vida normal, revisiones, medicación, cuidado con los esfuerzos y poco más, nada hacía pensar que yo era diferente al resto de las chicas de mi edad; y con el paso de los años llegué a pensar que se habían equivocado, que aquel día tan temido durante los primeros años de mi vida, no llegaría nunca, visita tras visita siempre oía las mismas palabras: todo está como siempre, no ha habido cambios, sigue así y nos vemos el año que viene.
Pero entonces sucedió. Las palabras que sabría que un día llegaría a escuchar, pero que pensé que tal vez ya no escucharía nunca, llegaron a ser pronunciadas. Y se me cayó el mundo encima.
No fue duro, fue una pesadilla de la cual no sabía si tenía más miedo a despertar o a no despertarme jamás.
Hoy tengo una gran cicatriz que divide en vertical mi torso en dos partes casi simétricas, y cinco más en horizontal que me dan aspecto de juego chino de mesa...
...Soy muy afortunada, y es que no todo el mundo puede decir que tiene dos fechas distintas de cumpleaños...
💚 SINOPSIS 💚
Lucía es una joven de 16 años que una noche vive una dura experiencia que cambiará su vida para siempre. Años más tarde, tendrá que volver a enfrentarse con un pasado que creía ya superado.
💚 EL LIBRO 💚
Sobre fondo blanco, resalta un corazón humano entre unas manos de mujer ensangrentadas. Cuando
nos fijamos un poco más en la portada vemos que ese fondo tan blanco no es más que la bata de un médico, e inmediatamente pensamos en un cirujano. Arriba, también en rojo, el título del libro en mayúsculas: EL TRASPLANTE. y abajo, igualmente en rojo, el nombre de la autora: Ana María Ruiz. La contraportada, blanca y con una escueta sinopsis. No hace falta más, la portada y su título son lo suficientemente explícitos para saber lo que nos vamos a encontrar dentro. A mi, el corazón me da vuelco, se me acelera y a mi mente vienen recuerdos en forma de imágenes, sonidos y hasta olores (un olor dulzón, metálico, penetrante, que creía haberme quitado ya de encima y que vuelve a mí haciéndome arrugar la nariz) pienso que tal vez resulte algo desagradable la imagen, y seguramente no seré la única, pero entonces lo miro con detenimiento, fijamente, casi lo siento latir, y me doy cuenta de que no es un corazón muerto, ni un trozo de carne, es vida, pura vida.
Si alguien tiene que cerrar los ojos o siente nauseas al mirarlo, es que no ha visto su vida en peligro y no puede apreciar la belleza que encierra ese rojo y pequeño órgano que cabe entre las manos, que cabe en nuestro pecho.
💚 LA OPINIÓN DEL GATO 💚
Esta es la segunda novela de la escritora Ana María Ruiz, o tal vez debería decir relato largo o novela corta; como amante de los relatos, me quedo con esta acepción, relato largo, de esos que puedes leer en una sentada casi sin darte cuenta y sentir que acabas de ser partícipe de una gran historia en pocas páginas (60) y es que como diría una prima mía ¡Con cucharilla pequeña se saborea mejor el flan! ya sabéis, lo bueno si breve, dos veces bueno.
Y es lo que ha conseguido Ana María con este su segundo trabajo literario, brindarnos una gran historia en formato pequeño, una historia dura y hermosa, palabras en principio antagónicas y que sin embargo van unidas de la mano en la mayoría de las ocasiones, como nos contó Kawabata en "Lo bello y lo triste" ¿No os ocurre que salís del cine de ver una película y que a pesar de haceros llorar mares de lágrimas, la resumís con un: ¡una gran película, preciosa!.
Eso es una de las grandes cosas que posee el ser humano, la sensibilidad para apreciar la belleza en lo desgarrador, saber que la dureza de unos hechos no nos privará de ver la hermosura de lo realizado, que somos seres sensibles, empáticos, piadosos, emotivos, perspicaces, emocionales, luchadores e inteligentes, y que ante un hecho traumático sabemos reponernos y encontrar la manera de seguir adelante, aunque duela, para encontrar a lo largo del camino el lado amable de las cosas. Esos somos nosotros. Aunque nos cueste vernos tal cual somos.
Con su anterior novela, Ana María logró despertar en mi no solo una gran curiosidad por una historia que encerraba otra historia, como unas matrioskas hechas de palabras en lugar de madera, si no avivar la empatía que aletargada descansa en nuestro corazón harto este y cansada la otra de ver día tras día la parte más horrible de este loco mundo que endurece y hace callo en el alma; de nuevo, con esta historia, la autora nos desgrana las entrañas de su protagonista y desgarra las nuestras de tanto abrir nuestras carnes al sufrimiento y superación ajenos, nos hace llorar, enfadarnos, maldecir, casi vivir en un ¡ay! continuo ante las vicisitudes de una chica que bien podríamos ser cualquiera de nosotras, si, porque las cosas no solo les pasan a los demás, en cualquier momento, nos podemos convertir en protagonistas de una historia que nunca hubiéramos querido representar. Ana María nos muestra que si bien a todos se nos puede caer el cielo sobre nuestras cabezas, de igual manera todos podemos recomponer los cachitos y renacer de nuestras cenizas, por devastador que haya sido el incendio. Una historia áspera y hermosa a partes iguales, como la vida misma, un relato que trata de los abusos, la violencia, la esperanza, el amor, la fuerza, la superación y sobre todo, de la capacidad de personarse a uno mismo.
Doy las gracias a la autora por que de manera sencilla y natural, incluso breve, nos regala una gran y bellísima historia que me ha cautivado y removido como un tsunami emocional. Ana María Ruiz, en esta su segunda obra, no solo nos demuestra que su capacidad como escritora es inmensa y que tiene mucho que contarnos aún, si no que nos revela que el Corazón, es al fin y al cabo, el que mueve al mundo.
Por Yolanda T. Villar.
💚 EL LIBRO 💚
Sobre fondo blanco, resalta un corazón humano entre unas manos de mujer ensangrentadas. Cuando
nos fijamos un poco más en la portada vemos que ese fondo tan blanco no es más que la bata de un médico, e inmediatamente pensamos en un cirujano. Arriba, también en rojo, el título del libro en mayúsculas: EL TRASPLANTE. y abajo, igualmente en rojo, el nombre de la autora: Ana María Ruiz. La contraportada, blanca y con una escueta sinopsis. No hace falta más, la portada y su título son lo suficientemente explícitos para saber lo que nos vamos a encontrar dentro. A mi, el corazón me da vuelco, se me acelera y a mi mente vienen recuerdos en forma de imágenes, sonidos y hasta olores (un olor dulzón, metálico, penetrante, que creía haberme quitado ya de encima y que vuelve a mí haciéndome arrugar la nariz) pienso que tal vez resulte algo desagradable la imagen, y seguramente no seré la única, pero entonces lo miro con detenimiento, fijamente, casi lo siento latir, y me doy cuenta de que no es un corazón muerto, ni un trozo de carne, es vida, pura vida.
Si alguien tiene que cerrar los ojos o siente nauseas al mirarlo, es que no ha visto su vida en peligro y no puede apreciar la belleza que encierra ese rojo y pequeño órgano que cabe entre las manos, que cabe en nuestro pecho.
💚 LA OPINIÓN DEL GATO 💚
Esta es la segunda novela de la escritora Ana María Ruiz, o tal vez debería decir relato largo o novela corta; como amante de los relatos, me quedo con esta acepción, relato largo, de esos que puedes leer en una sentada casi sin darte cuenta y sentir que acabas de ser partícipe de una gran historia en pocas páginas (60) y es que como diría una prima mía ¡Con cucharilla pequeña se saborea mejor el flan! ya sabéis, lo bueno si breve, dos veces bueno.
Y es lo que ha conseguido Ana María con este su segundo trabajo literario, brindarnos una gran historia en formato pequeño, una historia dura y hermosa, palabras en principio antagónicas y que sin embargo van unidas de la mano en la mayoría de las ocasiones, como nos contó Kawabata en "Lo bello y lo triste" ¿No os ocurre que salís del cine de ver una película y que a pesar de haceros llorar mares de lágrimas, la resumís con un: ¡una gran película, preciosa!.
Eso es una de las grandes cosas que posee el ser humano, la sensibilidad para apreciar la belleza en lo desgarrador, saber que la dureza de unos hechos no nos privará de ver la hermosura de lo realizado, que somos seres sensibles, empáticos, piadosos, emotivos, perspicaces, emocionales, luchadores e inteligentes, y que ante un hecho traumático sabemos reponernos y encontrar la manera de seguir adelante, aunque duela, para encontrar a lo largo del camino el lado amable de las cosas. Esos somos nosotros. Aunque nos cueste vernos tal cual somos.
Con su anterior novela, Ana María logró despertar en mi no solo una gran curiosidad por una historia que encerraba otra historia, como unas matrioskas hechas de palabras en lugar de madera, si no avivar la empatía que aletargada descansa en nuestro corazón harto este y cansada la otra de ver día tras día la parte más horrible de este loco mundo que endurece y hace callo en el alma; de nuevo, con esta historia, la autora nos desgrana las entrañas de su protagonista y desgarra las nuestras de tanto abrir nuestras carnes al sufrimiento y superación ajenos, nos hace llorar, enfadarnos, maldecir, casi vivir en un ¡ay! continuo ante las vicisitudes de una chica que bien podríamos ser cualquiera de nosotras, si, porque las cosas no solo les pasan a los demás, en cualquier momento, nos podemos convertir en protagonistas de una historia que nunca hubiéramos querido representar. Ana María nos muestra que si bien a todos se nos puede caer el cielo sobre nuestras cabezas, de igual manera todos podemos recomponer los cachitos y renacer de nuestras cenizas, por devastador que haya sido el incendio. Una historia áspera y hermosa a partes iguales, como la vida misma, un relato que trata de los abusos, la violencia, la esperanza, el amor, la fuerza, la superación y sobre todo, de la capacidad de personarse a uno mismo.
Doy las gracias a la autora por que de manera sencilla y natural, incluso breve, nos regala una gran y bellísima historia que me ha cautivado y removido como un tsunami emocional. Ana María Ruiz, en esta su segunda obra, no solo nos demuestra que su capacidad como escritora es inmensa y que tiene mucho que contarnos aún, si no que nos revela que el Corazón, es al fin y al cabo, el que mueve al mundo.
Por Yolanda T. Villar.
ANA MARÍA RUIZ
El Trasplante
Editorial Letrame
Facebook de la autora.
©TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS
La portada me parece fascinante *.*
ResponderEliminarY a mi...absolutamente fascinante.
EliminarUn besito.
Gracias Yolanda por tu maravillosa emotiva reseña.....un besazoooooo guapa
ResponderEliminarGracias a ti por tu generosidad ante todo, y por tu buen hacer con las letras.
EliminarUn besazo!!!
Gracias por la reseña. Besos.
ResponderEliminarUn placer!!!
EliminarBesitos.
Uffff!!!! Pues sí.... a veces las historias más tristes y desgarradoras son las mas bellas también.
ResponderEliminarEs verdad que mucha gente está esperando algún órgano, y a veces mueren sin que llegue... Y no solamente es esperar a que haya una donación, después viene la operación y si tu cuerpo lo rechaza o no... Una de esas experiencias que no puedes entender si no la vives!! :)
Pues si Ana Belén, es una de esas experiencias que marcan un antes y un después en la vida, en mi caso, una nueva vida.
EliminarLa novela es dura, pero muy bonita, de verdad.
Un besito, guapa!!
Uy, pues a mi la portada me da algo de grima y si encima la historia es tan desgarradora...la voy a dejar pasar porque anímicamente no me apetecen estos temas. La apunto para más adelante. Besos, guapi
ResponderEliminarUn besito, cielo!!! Pasa buena semana!!
EliminarHola preciosa!
ResponderEliminarA mí me pasa como a Marina, que la portada me da un poco de grima, vamos que no la eligiría por ella, ya sé que muchas veces me dejo influenciar por las portadas y dejo pasar historias preciosas, pero es que no lo puedo remediar. La verdad que ya había visto otras reseñas sobre este libro y todas coincidid en que es una gran historia dura y hermosa, así que no la descarto. Besotes
Hola carinyet!! Yo también me fijo mucho en las portadas, a veces he dejado pasar un buen libro al principio por que no me ga gustado la portada.
EliminarEste libro te gustaría, es muy bonita.
Un besito!!
hola! es un dilema emocional estos temas, no se que haria en ese caso, te compartimos, pero yo en lo personal, soy pitu, tuvimos tres perdidas por cancer y no me animo con la lectura. con el tiempo capaz pase.gracias y quedas compartida! saludosbuhos.
ResponderEliminarHola Pitu! Cada cual debe seguir su proio ritmo y disfrutar con la lectura, ya habrá tiempo cuando te encuentres emocionalmente mejor.
EliminarUn Besito!! Y mucho ánimo.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
EliminarLa portada ya me ha impactado, es una historia dura, no me importaría leerla ;)
ResponderEliminarLa portada es muy explícita, no cabe duda de lo que va la historia, pero lo mejor, es que lleva sorpresa...
EliminarUn besito.
Pues empezando por la portada,a mí no me resulta nada atractiva, más bien desagradable.La historia sí parece de esas que aportan muchos sentimientos al lector.No lo descarto, aunque de momento no estoy para una historia así que preveo triste.
ResponderEliminarUn beso
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
EliminarHola Inés! Cada cual marca sus tiempos y en la lectura no iba a ser menos, hay que leer y disfrutar.
EliminarEs una historia dura, no hay que engañarnos, pero no la calificaría de triste.
Un besito!
Pues a mí la portada en sí no me parece desagradable. Tampoco bonita ni atractiva, obviamente, pero es un corazón, la vida en sí misma. Más bien lo que creo es que da la sensación de que dentro vas a encontrarte un ensayo médico en lugar de un relato novelado, como es el caso. Se te nota que a ti te ha llegado muy dentro por tus circunstancias personales (que te agradezco enormemente que hayas compartido con todos nosotros, por cierto), y aunque soy muy de relatos largos, acabo de perder a un familiar precisamente por el rechazo a un transplante, así que me interesa un montón, pero voy a esperar un poquito. Pero lo leeré si se me presenta la ocasión seguro.
ResponderEliminar¡Besote!
Hola carinyet! Está claro que la editorial ha conseguido revuelo con la portada, y mira, una forma más de llamar nuestra atención. Siento mucho lo de tu familiar,las posibilidades de éxito total en un trasplante siguen siendo bajas por desgracia, pero la medicina sigue avanzando y se que un día se conseguirá.
EliminarUn beso enorme!!
Hola guapa, como dices la portada es impactante pero yo no diría que provoca rechazo. Eso sí, yo que ya conocía tus circunstancias personales debido a nuestro querido escritor común, creo que has sido muy valiente al comentarlo publicamente.
ResponderEliminarUn besazo guapa.
Hola preciosa! Muchas gracias, yo me siento afortunadísima y estoy muy orgullosa de mis cicatrices, no las oculto, son una muestra de lo poco que faltó y que por fortuna vencimos.
ResponderEliminarUn besote carinyet!!
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminar¡Hola guapísima!
ResponderEliminarMira, no sé yo cómo de bonito será este relato largo pero tu reseña desde luego que lo es. ¡Qué precioso ha sido leerla! Te lo prometo, me ha encantado <3 Y comparto tu opinión totalmente respecto a los relatos jaja a mí me encantan. Y también tienes toda la razón de que el humano tiene esa cualidad, saber encontrar belleza en lo desgarrador. Sin embargo puf... Creo que sería una lectura demasiado dura para mí :(
¡Besitos sonámbulos! ★🌙
Hola carinyet! Muchas gracias por la parte que me toca, eres un sol!! El relato es tan bello como duro, pero es que el final es tan hermoso, que vale la pena pasar «un mal rato» solo por ello. Leer es disfrutar, así que tú elige la lectura que en ese momento te haga feliz, lo bueno de los libros, es que seguirán ahí...
EliminarUn besote grandote!!
Hola carinyet! Muchas gracias por la parte que me toca, eres un sol!! El relato es tan bello como duro, pero es que el final es tan hermoso, que vale la pena pasar «un mal rato» solo por ello. Leer es disfrutar, así que tú elige la lectura que en ese momento te haga feliz, lo bueno de los libros, es que seguirán ahí...
EliminarUn besote grandote!!
Dura que no triste y hermosa, me gusta lo que nos cuentas de esta lectura, dejando a un lado la portada que impresiona un poco, pero que como tú dices logra llamar nuestra atención.
ResponderEliminarUn abrazo.
La historia es bonita, pero es dura, como la vida misma.
EliminarUn besito!
Ains, a mí me has retorcido un poquillo. Sería incapaz de tener ese libro en mi casa, porque tengo una cardiopatía desde que nacía, y soy incapaz de ver material médico, contra más un corazón en la portada de un libro, me causa mucha ansiedad. De hecho he leído tu reseña por encima. Y creo que este libro no es para mí. Eso que pones al principio (el poema y después como una especie de texto) ¿son extractos? ¿Lo añades tú? No me queda muy claro.
ResponderEliminarUn abrazo y a seguir disfrutando de la lectura :)
Te espero en La Reina Lectora
Hola guapa!! cada uno tiene que leer lo que considera que le hace feliz o le apetece en un momento, cada cosa a su tiempo. Como digo al principio, en esa especie de prólogo que siempre hago en mis reseñas, yo nací con una severa cardiopatía, tanto que ya he sido operado a corazón abierto y he estado entre la vida y la muerte, algo muy muy duro. Pero este libro, tal vez porque he pasado por ello, no me ha resultado tan duro en ese aspecto, pues lo del trasplante no es el único tema que se trata en el libro, digamos que es la consecuencia del primer tema (duro también, la violencia a la mujer)
EliminarEntiendo que al padecer una cardiopatía te cueste ponerte con su lectura, ya te digo que en mi caso, no me ha supuesto dureza alguna, ha sido pura empatía porque se de que habla, lo que siente la protagonista y lo bello que resulta superar algo así.
Al principio siempre pongo una poesía o canción, o fragmento de algo que me guste mucho y tenga que ver con el libro a reseñar, para personalizarlo y dejar mi impronta.
Un besito cariño, y ánimo, hoy en día las cardiopatías se están viendo bien resueltas, lo digo por que lo he vivido y vivo gracias a ello.
A mi también me ha encantando el libro, sin duda es un libro duro pero precioso. Que pena que por ser tan corto y por la portada la gente no le de una oportunidad, porque yo creo que se sorprenderían gratamente.
ResponderEliminarMe alegro que lo hayas disfrutado tanto como yo, B7s
¡Hola Ali! es cierto, el libro se hace hasta corto, hay momentos en que todo pasa demasiado rápido, pero es precioso.
EliminarUn besito cariño, me alegro que hayamos coincidido en libro e impresiones.
Pasa un buen finde.
Me chiflan los relatos, y más concretamente los relatos largos o las novelas cortas (por el momento mis dos libros publicados dan fe de ello), viendo lo que te ha gustado tendré que tenerlo muy en cuenta. Indagaré un poquitín más sobre la autora. Gracias por la recomendación.
ResponderEliminarUn beso ;)
¡Hola Ray! oye, pues me gustaría leer tus libros, me has dejado con la curiosidad revoloteando inquieta.
EliminarEs un libro bonito en el fondo, con un final tan bello como triste, según con lo que cada cual esté dispuesto a quedarse.
Un besito Ray.
La verdad es que la portada impacta, y la historia debe ser dura, pero siempre que hay superación y lucha hay algo que merece la pena.
ResponderEliminarBonita reseña.
Besos
Hola guapa! La portada nos adelanta sobre lo que nos vamos a encontrar dentro, realidad brutal.
EliminarUn besito!
No lo conocía, pero me alegro de que te haya gustado tanto. He empezado a leer sin ver de que libro hablabas, y al principio pensaba que nos contabas una historia tuya, jajajaja, luego ya he visto que era una reseña :)
ResponderEliminarBesos!
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarHola Laura! Bueno, el principio si es mi historia, es verídica, ocurrió hace solo tres años...al principio siempre hago un prólogo personal para enlazar con el libro que reseño. Pero ya ves, esta vez más personal no ha podido ser.
ResponderEliminarUn besito guapa!!
Tremenda tu historia... Enhorabuena por tener dos fechas de cumpleaños ;)
ResponderEliminarNo conozco libro ni autora, leo mucho ahora sobre seguro (y para mí seguridad es autores y libros por los que ya han pasado los años y han aguantado ese paso del tiempo).
Gracias por compartir tu historia personal.
Un abrazo
Hola guapa! Bueno, la vida es así, hay que adaptarse o sucumbir. Todos pasamos etapas hasta en los gustos lectores, lo importante es leer lo que te apetezca y te haga feliz.
ResponderEliminarUn besito.
Pues sí, merece la pena soltar una lagrimita o las que hagan falta para sentirse como más vivo y más cercano a otras personas. Me gustan esas historias tan cortas pero que cuentan tanto, es como magia. Me apunto.
ResponderEliminarBesos