martes, 8 de septiembre de 2015

SÓTANO MACABRO de Reyes Vázquez





"Mi hijo me había contado que durante sus visitas al pueblo, la gente se había mostrado algo retraída con él debido a que era un De la Poer; por análoga razón ahora yo experimentaba el mismo recibimiento que persistió hasta que logré convencerlos que casi ni tenía noticias de mis antepasados. No obstante, los vecinos no se mostraban hospitalarios conmigo, razón por la cual recurrí a Norrys para recopilar todas las tradiciones populares que aún seguían circulando. Lo que no me podían perdonar era que yo hubiese venido a restaurar lo que para ellos era el máximo emblema del aborrecimiento; más o menos oscuramente, para todos ellos Exham Priory no era más que una cueva de monstruos."

(Ratas en las paredes. Lovecraft)






Cuando éramos niños, mis amigos y yo creamos un club secreto. Eran requisitos imprescindibles entre otros, leer un libro de Los Cinco, Los Siete Secretos, Torres de Malory o las Aventuras de Merlín y sus amigos, y por supuesto, vivir una aventura inolvidable antes de que acabara el verano; al cumplir los 14 años, las chicas decidimos que ya éramos demasiado  mayores para pertenecer a ese club infantil, íbamos a ir al Instituto y esas chiquilladas ya no iban con nosotras, el próximo verano crearíamos el  “Club Eurípides” con nuevas normas y por supuesto, otros intereses distintos al infantil Club los “Piratas sobre ruedas”. Hicimos un pacto con los chicos, ese verano tendríamos nuestra última gran aventura y un año después, cada cual crearía su propio club; el verano transcurría y las vacaciones estaban a punto de acabarse sin que nada extraordinario nos pasase, iba a ser una despedida muy aburrida.

Entonces ocurrió algo que no olvidaríamos nunca. Organizábamos el cumpleaños de Elenita, como todos los años, a finales de agosto, días antes de que cada cual volviera a su casa, y nos dispusimos a organizar una gran fiesta “antigua”, nos disfrazaríamos con ropa vieja de nuestras abuelas y seríamos  “señoritas con encajes y botines, y chicos con sombrero”. Nada mejor que la antigua bodega de Elenita, en la que sus abuelos guardaban tesoros dentro de enormes baúles; y ni cortos ni perezosos, allá que bajamos dispuestos a saquear cada rincón de la bodega. Fue al saltar sobre un vieja tinaja de vino, cuando esta cayó rodando por el suelo y se hizo añicos al chocar contra la pared contraria, ¡nos la íbamos a cargar!...y entonces la vimos. Tras donde segundos antes estaba la tinaja, había una puerta pequeñita, color verde los chicos se pusieron a cantar la vieja canción de ¿Qué habrá tras la puerta verde? y tras pensarlo poco y con mucha inconsciencia encima logramos abrirla haciendo palanca con un atizador de chimenea.
Pasamos de rodillas, todo estaba lleno de telarañas y las chicas asegurábamos que había ratas enormes que nos comerían enteras, aunque no vimos ninguna; lo que si vimos era un somier con mantas y restos de platos, vasos, cubiertos, unas botas, tabaco de liar, una silla rota y una bota de vino; olía fatal y apenas se podía respirar, varios de nosotros sentimos un soplo de aire en la nuca y una voz que tosía.

Sobra decir que nos pillaron y nos castigaron el resto de vacaciones sin bicicletas, pero  nos dio igual, pues gracias a ese descubrimiento, el abuelo de otra de nuestras amigas nos contó que allí decían que se escondían los maquis de Alarcón durante la postguerra, y que en una ocasión murió uno de ellos debido a una neumonía, nadie sabe qué pasó con su cuerpo y nadie habló nunca de ello ¡Tos, oímos toser!...
Sin duda fue la mejor de las aventuras que podíamos haber tenido. Aunque desde ese momento comencé a sentir claustrofobia cada vez que bajaba a algún sótano…siento que en cualquier momento, alguien toserá…toserá…toserá…



EL LIBRO.

“Javier despierta dentro del maletero de un coche. Se encuentra amordazado y atado de pies y manos, lo último que recuerda es haber cenado con sus amigos y caminar hacia el aparcamiento en el cual estaba su coche; un terrible dolor de cabeza le aparta de sus intentos por recordar algo y traerlo irremediablemente a ese maletero ¿Qué ha pasado? ¿Quién le ha agredido? ¿Qué pretende hacer con él? ¿Se trata de un secuestro? Lo que Javier desconoce es que ese oscuro maletero tan solo es la antesala de la que será su peor pesadilla.
Irene se dirige a su casa atravesando un parque, es algo que hace cada vez que regresa de hacer la compra, es tan solo una adolescente que va a tener que vivir la peor experiencia de su vida, tan solo estaba en el lugar equivocado  en el peor de los momentos; cuando abre los ojos, cree estar viviendo una pesadilla…y sin duda lo es.
Javier e Irene cruzarán sus caminos y verán sus destinos  convertido en uno solo ¿La unión hará  la fuerza o deberán aplicarse el dicho de ¡Sálvese quien pueda!”
Sótano macabro de Reyes Vázquez es una apasionante y emocionante novela que conjuga con maestría el terror más absoluto con el thriller psicológico, en el cual, las emociones recorren, una a una,  la mente de los protagonistas transformando su existencia en una montaña rusa. La miseria del alma y los más bajos y depravados deseos, chocarán con la fuerza mental del ser humano y con el principal de los instintos: la supervivencia.




LA OPINIÓN DEL GATO.

Soy de las que piensan que nada sucede por azar, que todo en esta vida tiene un motivo, y que todo está relacionado entre sí; no estamos solos en el mundo, ¿por qué entonces nuestros actos habrían de ser sucesos  aislados y que no afectarán al resto de personas? La novela llegó a mi hace ya algún tiempo, pero por una u otra razón, su lectura se demoraba, y es que además de no creer en el azar, estoy convencida de que hay un tiempo para cada cosa y cada cosa a su tiempo.
Y entonces al fin, llegó el momento. Estaba de vacaciones, el calor estaba demostrándonos que el infierno no está tan lejos como pensamos y el hielo picado de un mojito se deshacía a marchas forzadas; me encontraba cómodamente sentada baja la sombra de mi parra, el silencio era total, pensaba en los veranos  pasados allí mismo, veranos de niñez, de juegos, de amigos, de aventuras y en ese momento ¡El sótano! aquel sótano que nos dio nuestra mayor aventura de juventud ¡Y ya hacía de eso treinta años, treinta años justos! y me moría de ganas de ver a mis amigos y preguntarles si recordaban aquel verano, y sobre todo aquel sótano. Y no lo pensé dos veces. Me levanté, fui a por el E-book, busqué Sótano macabro de Reyes Vázquez, y me tumbé bajo la parra para comenzar la lectura de la tan postergada novela.
Lo de comenzar es tan solo una ilusión. Si empiezas a leer la novela de Reyes Vázquez, ya no puedes parar, de hecho me dio  mucha rabia parar para irme a la cama, aguantar sin saber lo que ocurriría con Javier e Irene, cuando llevaba más de la mitad del libro leído, era cruel. ¿Por qué había que dormir, comer, dar conversación a la familia, quedar con amigos? ¡Vamos hombre, que hay verano de sobra por delante, ahora solo quiero leer y leer! Pero no me quedó más remedio  que esperar unas horas para retomar la lectura.
Al igual que el autor, mi primero novela de terror fue “Cementerio de animales” de Stephen King, aquella obra me marcó e impresionó a partes iguales, y es que algo que no entienden los que me conocen bien, es como alguien tan miedosa como yo, se pirra por este género literario; tal vez sea que llevo a cabo la máxima de: la mejor manera de vencer el miedo es enfrentarte a él. O simplemente que estas historias hacen que me lata el corazón con fuerza, que la sangre fluya rápida por mis venas y que un enorme cosquilleo se apodera de mi estómago.  Leyendo y sintiendo Sótano macabro, he gozado viendo reminiscencias de esas lecturas que autor y lectora compartimos: Poe, Lovecraft…ha sido un auténtico deleite y una aventura en si leerla.  A ratos el terror más brutal al estilo La matanza de Texas, 13 fantasmas o las Colinas tienen ojos se apoderaba no solo del libro, si no de esta que leía sin respirar siquiera, y unas líneas después El silencio de los Corderos, Silent Hill o El coleccionista de amantes aparecían sutilmente reflejados en la historia de Vázquez.
Para todos los que amamos el cine y las novelas  de terror,  el thiller psicológico y las historias fantásticas decimonónicas , Sótano macabro es una parada obligada como La parada de los monstruos− no solo se trata de una novela visual, si no musical. Creo que este despliegue de buena música la hace todavía más intensa, más tenebrosa incluso, y es que al igual que cada libro tiene su momento y su lugar, cada historia tiene su melodía, esa que la hace vibrar, magnificar, intensificar e incluso, cortar la respiración.
Una novela que hay que leer en su momento y en su lugar, para poder disfrutarla tal y como se merece; una novela imprescindible para los amantes de las emociones fuertes, los retos, la aventura y el terror en estado puro. Magnífica. Tal vez tengan que abstenerse aquellos que se impresionen fácilmente o cuya susceptibilidad se vea rápidamente dañada, pero si quieren un consejo ¡Al miedo se le mira de frente y se le planta cara!


Los sótanos aún pueden ser más oscuros y fríos de lo que son de por sí ¿O acaso te gustan y te sientes cómodo en ellos? ¡Oh, oh!  Creo que estamos ante un zapatos viejos




SÓTANO MACABRO
Reyes Vázquez

Edita Createspace






ISBN-10: 1500341037
ISBN-13: 978-150034103








Una Reseña de Yolanda T. Villar

©TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS

1 comentario:

  1. ¡¡¡Que escalofriante!!!

    La novela en si misma, la introducción de Lovecraft y el video final ¡ponen los pelos de punta! Reconozco que soy muy miedica para estas cosas, pero al ser novela y no película, tal vez pueda leerla sin morir de un infarto en el intento, jajaja

    Besis

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